Tal y como indica la II Asamblea Mundial sobre el Envejecimiento (2002), a principios del siglo XX podía encontrarse una persona mayor de 65 años cada veinte ciudadanos. A principios del siglo XXI esta cifra cambia, ya que podía encontrarse una persona  mayor de 65 años cada seis ciudadanos. Si este proceso continúa igual, en el año 2050 existirá una persona mayor por cada 3 ciudadanos.

El envejecimiento es un fenómeno que no puede ser ignorado.

Con el envejecimiento, pueden producirse diversos cambios o alteraciones que, con mayor o menor intensidad, se ven afectados de forma general en la persona mayor. Todos los sentidos interaccionan con el entorno que les rodea, pero la respuesta a determinados estímulos se ve afectada directamente a medida que la persona envejece. En este sentido, se hace necesaria la creación y adaptación de edificios destinados al cuidado y bienestar de las personas mayores, de acuerdo con sus necesidades y dependencias.

Color y arquitectura para las personas mayores

Con el transcurso de los años en la vida de una persona, ésta empieza  a experimentar cambios en la percepción visual, tanto en el reconocimiento general como en la capacidad para distinguir colores. Así pues, la percepción del espacio, la agudeza visual, la nitidez de la visión y el color varían a medida que la persona va envejeciendo.

Sin embargo, debido a la subjetividad en la percepción del color, en reducidas ocasiones se ha evaluado si la percepción del tono en una persona mayor coincide con la de los demás. ¿Hasta qué punto se produce la pérdida de la capacidad de percepción del color y cómo debemos actuar ante ello?

Este fenómeno a estudiar es relevante porque existe una importante falta en la formación de los arquitectos respecto al color y su aplicación, tomando como protagonista a la persona mayor. Adaptar los espacios favorece en gran manera la mejora del confort visual y autonomía de quienes necesitan algún tipo de requisito visual.

Residencias destinadas a personas mayores ¿Un hospital, o un lugar para vivir?

Centrándonos en las residencias destinadas a personas mayores, son numerosos los casos que se construyen centros de esta índole tan especifica en el que el bien final es procurar una calidad de vida digna a la persona mayor, sin embargo, promueven una arquitectura hospitalaria, con ambientes monótonos, espacios blancos o beige, carentes de interés y estímulo.

Nuestra arquitecta, Anna, como investigadora y miembro del Grupo de Color de la Universitat Politècnica de València, destaca la importancia del color como una de las herramientas más útiles para modificar las características del espacio. El color, aplicado de una determinada manera, además de poseer la cualidad de otorgar carácter a un espacio, es capaz de influenciar al ser humano en la toma de decisiones, mejorando su autonomía, incluso llegando a estimular el comportamiento de la persona. El color se encuentra en todos los momentos de nueva vida diaria, en nuestro entorno, en nuestros hogares, muchas veces nos ayudan a orientarnos, otras a atraer nuestras miradas hacia algún punto concreto, incluso permite comunicar en el espacio arquitectónico.

Así pues, el estado de bienestar residencial para el conjunto de nuestra sociedad se verá influido no sólo por el contenedor que alberga, sino también por la percepción de su arquitectura, los objetos, el ambiente cromático, el espacio y las reacciones que se generan ante éstos.

La importancia de la difusión

Como no queremos extendernos demasiado, hacemos una llamada de atención a la importancia de adaptar el hábitat de la persona mayor, teniendo en cuenta la mejora de su confort visual. La preocupación por el espacio arquitectónico, no por proporcionar a las personas mayores el espacio que requieren para satisfacer sus necesidades de carácter biológico y funciones básicas, sino también de intervenir en su prosperidad y confort. Es de gran trascendencia que el arquitecto entienda el estado físico, psicológico y social de las formas de habitar, pues debe ser capaz de modificar estas condiciones a partir de determinados factores, según su protagonista y necesidad.

Y por último, queremos haceros llegar, desde Decania Arquitectura, la necesidad de difundir la importancia de la persona mayor en nuestra sociedad desde un punto de vista arquitectónico y hacer eco de este hecho tan relevante.

¿Quieres saber más?

Os dejamos, a continuación, un video introductorio sobre color, la importancia del color en los espacios destinados al cuidado y salud, expuesto en el Congreso Nacional de Color 2016 en Ourense. Se trata del inicio de nuestra investigación, que pretende finalizar en una tesis doctoral, sobre arquitectura, color y envejecimiento, esperamos que sea de vuestro interés!

Video Screencast ¿Te apetece echarle un vistazo? Haz clic sobre el siguiente enlace